Verano

Junio acaba, y llegan las vacaciones escolares.
Pocos niños corretean por la plaza. El escondite.
En las puertas, salen al fresco algunos jubilados que vuelven al veraneo
Al fresquito del pueblo
Olor a paja seca, recién segada
Calor intenso, seco, siempre por San Pedro.
A lo lejos,
hacia la cuesta Ayuso o La Nava,
se escucha el rugir de las cosechadoras que aprovechan la noche.
Idas y venidas de tractores con la carga del grano.
En su callejeo,
el paseante piensa  cuántas puertas cerradas,
ya no recuerda quién vivía en ellas
(también ella se fue un día en su juventud, y ha vuelto para quedarse)
Poca animación en la plaza.
Apenas un bar abierto, cada vez somos menos.
Ahora otros tiempos,
Y cavila qué se podría hacer para devolver más vida a su pueblo.

Celia Herranz
Junio 2015

A mi pueblo

(Cuando la imaginación me lleva hasta Bernardos, siento una profunda emoción. Es mi pueblo)

Los fríos y las calores;
mieses, ovejas y cerdos;
la pizarra seca y dura…
Añoranzas y recuerdos.

Las jotas y el paloteo.
La majestad de unas gentes
que te acogen con franqueza
y transparencia en las frentes.

La familia, los amigos…
Nos agrada recordar
a aquellos que nos mostraron
un camino por andar.

Quiero estar dentro de ti.
Tus afueras, visitar.
Recorrer tus viejas calles.
De tus aires, disfrutar…

Santa Inés y el río Eresma;
las canteras y el Castillo.
El Abajo, Peña Mora,
el depósito, el pocillo…

La plaza, el Ayuntamiento,
Constanzana, Cañamares,
Padrastro y Humilladero,
barbechos, viñas, pinares…

Todo me llena, me invade,
me evoca buenos momentos.
Me siento bien cuando vivo
tus sitios y tus adentros.

Luis Arranz Boal

Andrés (elegía a una buena persona)

Mirada franca. Sincero.
Hombre de una sola pieza.
Acreditar tu grandeza
y tu integridad, requiero.

Tardaremos en caer
en la cuenta de tu ausencia;
pues tu entrañable presencia,
olvidarla es no poder.

Esa imagen imborrable
de tu caminar lastrado.
De tu duda razonable…
Culto. Discreto. Educado.

Tus sanas curiosidades.
Tu lucha sorda y tozuda
frente a las adversidades.
Entrega limpia. Desnuda.

Sabio. Humilde en tu quehacer.
Risa fresca. Contagiosa.
Y esa tu forma de ser:
confiada y animosa.

Sufriste para vencer
tu dolencia personal.
Tus hijas y tu mujer
siempre atentas a tu mal.

Segovia te enamoraba
-su cultura, tus paseos…-.
Y su entorno te colmaba
de ilusiones y deseos.

¡Lucen coronas de flores
Nueva Segovia, el Parral,
el Eresma y el Clamores,
Juan Bravo y la Calle Real!

Te lloramos consternados.
Tu muerte nos sorprendió
por traidora. E indignados
porque… ¡ni tregua te dio!

Urdió un golpe vil, brutal
-con taimada alevosía-
donde más daño te hacía
esa guadaña mortal

La dura y cruel realidad
nos privará –en adelante-
de tu tan cordial talante.
De tu generosidad.

Recibe este adiós postrero,
dondequiera que tú estés.
Para todos fuiste, Andrés,
amigo, guía, hospedero…

D.E.P.

PARA ANDRÉS CERRACÍN ARRANZ (El “Niño” de la peña “Los Vampiros”)
Luis Arranz Boal (Sabadell)

Al político imputado, sin sueldo y encarcelado

Algunos políticos, cuando han sido elegidos, desoyen, desprecian y hasta roban a su pueblo. Incluidos sus propios votantes. La Autoridad normalmente se ejerce. Del poder, muchas veces se abusa. Aunque no todos los políticos son iguales.

Polis –del griego- es ciudad.
Política es gobernar
al pueblo con dignidad.
Y por el pueblo, luchar.

Escucharle al legislar;
su mandato, obedecer;
sus libertades, jurar;
sus derechos, defender.

Esta es su razón de ser:
en perfecta comunión,
la Democracia al poder
gobernando a su nación.

Nosotros los elegimos
y, en ellos, depositamos
la esperanza que exigimos
a quien fielmente pagamos.

Hay políticos, hoy día,
que rompen esta cadena.
Dejan el arca vacía
y su caja fuerte, llena.

Con falsas financiaciones
y otros cobros ilegales,
van evadiendo millones
a paraísos fiscales.

En limusina, escondidos,
compran jueces y abogados.
Y financian sus partidos
con los dineros robados.

La más digna profesión,
ajada y prostituida.
Y, del pueblo, la ilusión
defraudada y destruida.

Les declaran imputados
y se muestran ofendidos…
Simulan ser atacados.
¡No se dan por aludidos!

Democracia… ¿Qué te pasa
que no sabes protegerte?
Quienes atacan tu casa
demuestran no conocerte.

El pueblo va a defender
tu valor y tu verdad.
Volverán a renacer
justicia y honestidad.

¡A la calle! Que ya es hora
de echar a tantos bribones.
¡Salgamos todos ahora!
¡Basta ya de corrupciones!

Desde la casa del Rey
hasta el último ladrón…
¡Aplíqueseles la ley!
¡¡Que los lleven a prisión!!

 

Luis Arranz Boal

A esa suculenta morcilla

Por su excelente virtud
le escribo esta redondilla
a una afamada morcilla
que agasaja mi salud.

Sangre, arroz, grasa, picante…
Blanda, suave y esponjosa.
¡Tan gordita y tan hermosa…!
Corte fino y elegante.

En una tripa embutida,
revienta con el calor.
Al aliento le da “vida”
y, a las mejillas, “color”.

En cada pueblo, le dan
un toque que hará el placer
de quien –con vino y con pan-
presto se la ha de comer.

La de mi pueblo natal
se me muestra incomparable.
¡Su color tan natural!
¡Su sabor tan agradable!

No es otro producto más.
Es calidad contrastada
-con cariño elaborada-
que no defrauda jamás.

El que nunca la ha probado
no sabe lo que se pierde
cuando en su boca la muerde
y el estómago ha saciado.

Años ha de su existencia.
Nos revitaliza el Eros.
Los más recios caballeros
se inclinan en su presencia.

Este escrito va a acabar
porque ya hambre me va entrando,
con sólo estar relatando
tan exquisito manjar.

Adiós, morcilla querida
que en la mesa me acompañas
alentando mis entrañas…
¡Eres la sal de mi vida!

Dedicado a las morcillas elaboradas en Bernardos (Segovia)

Luis Arranz Boal (Sabadell)